18.12.09

FIESTAS DE DOBLE CARA

Fiesta de Navidad de la empresa:

Todo mundo a fingir que nos queremos, que trabajamos en equipo, que nos deseamos lo mejor, que estamos contentos con la oportunidad de laborar en en esta nuestra querida empresa, que de ninguna forma ansiamos el puesto de muestro compañero laboral y sobre todo que jamás nos tiraríamos mierda los unos a los otros.

La comida tipo restaurant finoles polanqués (no sé por que carajos no sirven una taquiza bien chingona, saldría más barato y sabría mas rico), el jefe de mi jefe queriendo entablar conmigo una conversacion poco entendible compuesta de palabras arrastradas enfoques de visión a ver si sigo a su lado y sería mas honesto de su parte decirme que se frota las manos por correrme y de paso a toda mi cabina.

Otra vez no me gané nada en la rifa, bailé con una niña de cabina vial que no se como se llama, diariamente nos saludamos y después nos ignoramos, bailamos una salsa y una de banda sin cruzar palabra alguna, al siguiente día de trabajo nos volvimos a ignorar. Aún no sé como se llama.

Algunas personas saben que bailo cuando estoy pedo, cuando estoy muy contento o cuando la pareja de baile me atrae físicamente, comienzo a sospechar que lo hago a ver si las vueltas me empedan mas rápido.

Consumí aproximadamente 1 litro de vodka que sabía a Smirnoff pero que el mesero perjuró que era Absolut, los tragos fueron en Tonic y apenas terminaba un trago cuando ya me estaba trayendo el sucesor, me atendió de maravilla y me largué sin darle propina, no fue mala leche, simplemente lo olvidé.

Mas tarde en otro lugar pero en la misma noche estuve platicando con una mujercilla que no se como llamarle; esposa, ex-esposa, novia, ex-novia, concubina, dejada de otra persona que a pesar de conocer desde hace varios años no considero mi amigo y creo que el si me considera como tal, el tema principalmente trató sobre como este conocido para mi desconocido a través de un buen regalo, le jodió la vida. (Por supuesto nunca lo reconocerá) Después intentó ligarme, seguramente empujada por el nauseabundo sentimiento de la soledad combinado con un poco de alcohol en su sangre. Hoy la iba a topar de frente y aceleró el paso para evitarme. Sentí un poco de pena.

Siempre pienso que puede ser mi última fiesta en esta empresa y tomo por las que me pueda perder, aún no me animo a conducir en estado de ebriedad mi motito tan chula ella, sin un solo rayón, me llevé el coche y para respetar la tradición de regreso me perdí, ni puta idea de donde estaba hasta que encontré Ciudad Universitaria, ya estando en mis terruños llegué sano y salvo a mi casa.

Espero que esta sea la última de verdad.

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